San Antonio Oeste-Rosario, regreso con los pies cansados pero el espíritu renovado

La vuelta a casa sin mayores contratiempos salvo una equivocación cuando salimos de Río Colorado donde en lugar de doblar en la Ruta 154, me confundió el control fitosanitario ubicado en ese lugar y seguí por la Ruta 22 por 25 km hasta que me di cuenta que el GPS me indicaba que estaba circulando por esa ruta. No quise seguir hasta la ruta provincial 1 y subir por ahí ya que no sabía si estaba asfaltada (después averigüé que es de tierra), así que volvimos esa distancia hasta el desvío hacia el norte. Por último llegando a Pérez y a sólo  20km de casa nos encontramos con un accidente sumado a reparaciones en la ruta 33 que nos tuvieron media hora parados. Llegamos a las 22 hs y en media hora ya teníamos todo el auto vaciado con todo el equipaje desparramado en el living. Nos esperaba armar las carpas y limpiarlas antes de volver a guardarlas, lavar las bolsas de dormir, y, guardar y ordenar todo lo que llevamos el siguiente fin de semana, más infinidad de lavados de ropa que empezaron esa misma noche. El lunes a las 6 de la mañana el despertador me volvería a la rutina diaria de la fábrica, lejos de las montañas, los lagos y los senderos interminables compartidos en familia.